We used electronic weighing platforms inside artificial nests to remotely study chick provisioning and growth in Shy Albatrosses (Thalassarche cauta) at Albatross Island, Tasmania, from 1996 to 1998. Pairs of birds concurrently carried radio-transmitters, allowing each meal to be attributed to an individual parent. Chicks received relatively small meals (372 g) once every 22 hr, and were provisioned at 392 g day−1 from the end of the brooding period to fledging. Meal size increased with chick age while the feeding frequency decreased, such that chicks were provisioned at a relatively constant rate until reaching peak mass (5.5 kg at 109 days). Provisioning subsequently declined and chicks lost mass, leaving the nest after 127 days weighing 5.0 kg. Male chicks were fed for 10 days longer than females, they received 27% more food, grew faster, and attained higher peak and fledging masses. Between hatching and fledging, overall food consumption by chicks was estimated at 44.9 kg. Rates of chick provisioning and growth were constant between years. Overall, adult males and females provisioned chicks equally. However, large imbalances were often observed within pairs, and in some cases one parent adjusted its provisioning schedule to compensate for its mate. Adults generally decreased provisioning rates when chicks were well fed, but only some elevated their feeding frequency when faced with greater demands. The ability to increase provisioning to hungry chicks contrasts with expectations from studies of other neritic species.
Alimentación y Tasa de Crecimiento de Pichones de Thalassarche cauta en la Isla Albatros
Resumen. Utilizamos balanzas electrónicas ubicadas dentro de nidos artificiales para estudiar a distancia la alimentación y el crecimiento de polluelos de Thalassarche cauta entre 1996 y 1998 en la Isla Albatros, Tasmania. Acoplamos radio transmisores a parejas de aves de manera que cada episodio de alimentación en el nido podría ser atribuido a uno de los padres. Los pichones recibieron comidas relativamente pequeñas (372 g) una vez cada 22 horas y recibieron 392 g de alimento por día desde el final del período en que las aves empollan hasta el abandono del nido. Mientras que el tamaño de las comidas aumentó con la edad de los pichones, la frecuencia de alimentación disminuyó. Al principio los pichones fueron alimentados a una tasa relativamente constante hasta alcanzar un pico en su peso (5.5 kg a los 109 días). Después de esto, la tasa de alimentación se redujo, generando una disminución en el peso hasta llegar a 5.0 kg al momento de abandonar el nido después de 127 días. Los polluelos machos fueron alimentados durante 10 días más que las hembras, recibieron 27% más alimento, crecieron más rápidamente y alcanzaron pesos superiores en el momento pico y al salir del nido. Desde la eclosión hasta el abandono del nido, el consumo total estimado de alimento por parte de los pichones fue de 44.9 kg. Las tasas de alimentación y crecimiento de los polluelos fueron constantes entre años. En general, los machos y hembras adultos alimentaron por igual a los pichones. Sin embargo, se observaron grandes desbalances entre los miembros de algunas parejas. En algunos casos, uno de los padres ajustó su tasa de alimentación al polluelo para compensar la de su pareja. Los adultos generalmente disminuyeron las tasas de suministro de alimento cuando los pichones estaban bien alimentados pero sólo algunos de ellos aumentaron la frecuencia de alimentación cuando recibieron demandas superiores. La capacidad de incrementar la tasa de alimentación de polluelos hambrientos contrasta con lo esperado a partir de estudios en otras especies neríticas.